SIN INTERMEDIARIOS
En la antigüedad cuando pecabas debías presentar un sacrificio de algún animal del catálogo y llevarlo para que el sacerdote lo presentara como ofrenda. Aunque vos quisieras no podrías entrar hasta el lugar donde él sacerdote llevaba las ofrendas.
Todo esto se acabó cuando Jesús vino a morir por nosotros, Él fue el último sacrificio y el que rompió ese velo de división. Ahora podemos tener una relación con Dios sin intermediarios. No lo merecíamos ni nada, al contrario estabamos comodos presentando nuestras “ofrendas” e incluso no queríamos saber nada sobre Él. Pero no se trata de nuestras buenas o malas obras sino de lo que Él hizo en la cruz del calvario, nos sacó del reino de la oscuridad para llevarnos a la luz.
A diferencia de los otros sumos sacerdotes, él no tiene que ofrecer sacrificios día tras día, primero por sus propios pecados y luego por los del pueblo; porque él ofreció el sacrificio una sola vez y para siempre cuando se ofreció a sí mismo. Hebreos 7:27 NVI
¿Por qué ahora entonces espera que un pastor o “profeta” llegue para acercarte a Dios? Criticamos y hablamos cosas como: el que dirigió hoy no tenía “unción”; no sentí nada en la iglesia hoy; BASTA YA! Ahora es una responsabilidad individual el acercarnos a Dios, no necesitamos a nadie más, no le echemos la culpa a los demás por nuestro mal estado espiritual. Él nos espera con los brazos abiertos, ya no hay velo que nos separe. Es momento de volver a la Cruz y rendirnos completamente ante el creador de todo.
Hoy te animo que ores 15-20 minutos todos los días y leas 1 capitulo de la Biblia. Esto nos ayudará a mejorar, te aseguro que veras cambios en tu vida.
